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Debe extremarse las medidas de control de contaminación bacterial de alimentos.

Una racha de eventos de contaminación de alimentos con Salmonella, E.coli y  Listeria acontece en EE.UU.

En el quinquenio 1994-1999 fueron 32; en el quinquenio 2010-2014 se triplicaron los incidentes de contaminación bacteriana de alimentos hasta 120 (según Centers for Disease Control and Prevention de los Estados Unidos, según reciente información en el Washington Post).

El último incidente se produjo en un restaurante de la cadena Chipotle Mexican Grill en Minnesota con el resultado de 60 personas enfermas por consumir tomates infectados.

Otras 39 personas se enfermaron en restaurantes de la misma cadena Chipotle en los estados de Washington y Oregon. Por tal motivo la cadena Chipotle ha cerrado 43 restaurantes mientras se realizan las investigaciones oficiales sobre lo ocurrido.

Listeria y Salmonella son las bacterias responsables de la mayor parte de ls enfermedades y de las muertes por contaminación de alimentos que llegaron solo por Listeria a 33 decesos en el 2011.

Los primeros estudios atribuyen las infecciones mayormente a hortalizas y frutas contaminadas procedentes de México, aunque unas pocas también proceden de Turquía. No solo hortalizas y frutas,que son la mayoría, sino algunas casos de carnes se conoce también que han mostrado contaminación bacteriana.

La cadena de restaurantes Chipotle que sirve platos de la cocina mexicana, se distinguió por erigirse hace algunos meses como el líder del movimiento anti-OGMs al descartar su uso y pronunciarse por los alimentos orgánicos en sus restaurantes, con gran exposición de este hecho en titulares de prensa.

Ya se había reportado anteriormente en años previos en EE.UU., contaminación de tomates orgánicos procedentes de México. Casos semejantes de contaminación con bacterias se han dado en Europa con alimentos de origen orgánico, incluso uno muy severo hace unos meses en Alemania. Uno de los problema mas importantes en estos casos se encuentra en el uso  de deposiciones fecales o estiércol de animales de granja o en algunos casos como en México de empleo de aguas de albañal, en cultivos orgánicos en vez de fertilizantes químicos que no son aceptados según las actuales normas de certificación orgánica, pero son usados en los cultivos convencionales y los que emplean semillas transgénicas, que no se rigen por tales normas y que representan a nivel mundial el 98% del área agrícola.     

En el actual boom de agro-exportación que experimenta el Perú, deben extremarse las medidas precautorias para evitar que sucedan percances semejantes con las exportaciones de productos agrícolas, extremando las medidas sanitarias para evitar tales contaminaciones. Más importante aún, es asegurar la inocuidad de contaminación por bacterias de los alimentos para el consumo interno en el Perú.

Alexander Grobman Tversqui